Riesgo.
El concepto de riesgo es el
resultado inmediato de la existencia de la incertidumbre dentro del mundo
financiero. Siendo la incertidumbre el hecho que no se tiene certeza de lo que ocurrirá
en el futuro. Al encontrarnos frente a un mundo de múltiples elementos variable,
los cuales en la mayoría de los casos escapan de nuestro control.
Así el riesgo se define como la
incidencia que puede estimarse y afectar la decisión de inversión de un tomador
de decisiones. (Lahoud 2012), dicho de otra manera, la posibilidad que ocurra
un evento adverso, el cual afectara el valor de nuestros activos financieros.
El Modelo de Valoración de
Acciones, denominado CAPM (Capital Asset Pricing Model), clasifica el riesgo en
dos categorías: el riesgo sistémico y el riesgo asistémico o especifico.
El riesgo sistémico, también conocido
como riesgo de mercado, es aquel que está relacionado con los movimientos
generales de la economía donde se negocian los activos financieros, de esta
manera afectan a todos y cada uno de los activos, aunque el efecto que este tenga
sobre los mismos difieran de acuerdo a la naturaleza del activo. Corresponde a
este tipo de riesgo los determinados por los eventos monetarios, políticos, económicos
y sociales que afectan a todos. Por ejemplo, una devaluación del tipo de cambio
de la moneda, es un factor que afecta a toda la económica en su conjunto, pero
no a todos de la misma manera y en la misma medida: ante un evento de este tipo
los activos financieros asociados a empresa importadores podrían sufrir una
mayor afectación, de manera distinta a como lo haría con los activos
financieros de las organizaciones exportadoras o de las que no dependan del
comercio internacional.
En el caso de los riesgos
sistémicos o de mercado, estos no pueden ser diversificados, pues no dependen
del inversor y como se dijo anteriormente afectan a todos, aun cuando los
afectos sobre cada uno sean distintos. Son como la lluvia, caen sobre todos y
nos moja a todos, pero no todos se refrían.
El riego especifico o asistémico
es aquel relacionado de manera directa con el activo financiero en cuestión,
las variables de riesgo en estos casos están internamente relacionados con las
empresas emisores del activo financiero. Un ejemplo de esto sería un cambio en
la junta directiva de una organización, el decreto de dividendos por parte de
la empresa, a apertura o cierre de una línea de producción. En este caso los riesgos asistémicos o específicos
pueden ser diversificados, siendo este uno de los principales objetivos del
inversor; la diversificación del riesgo especifico, para ello buscara hacerse
con una cartera de inversiones que siendo representativa del mercado donde
opera, su riesgo sería igual del riesgo de mercado.