miércoles, 20 de mayo de 2020

La Rebelión en la Granja

La Rebelión en la Granja. Película animada basada en la novela satírica del britanico George Orwell publicada en 1945, nos muestra de manera entretenida la génesis y conclusión de todos los procesos de revolución socialista.

La afición y sus resultados.


La afición por ciertas aéreas del conocimiento humano es parte importante del desarrollo de un individuo, así toda persona, tendrá  fuera de sus tareas comúnmente desarrolladas, y en las cuales tendrá menor o mayor grado de pericia y profesionalismo, alguna otra habilidad a la cual dedique parte de su tiempo libre. Así algunos optaran por la fotografía, la pintura, la poesía e incluso la política.

En esta última de las ciencias del hombre, la política, es donde la situación se torna delicada; pues si entendemos que la política busca las maneras de cómo las sociedades libres buscan las forma de resolver sus problemas, estas deberían en el mejor de los casos ser orquestadas o dirigidas por profesionales de esta ciencia, sin menoscabo de los aportes que todos aquellos ciudadanos con escasos o nulos conocimientos de ella pudieran tener, es decir tomando en cuenta a la opinión de los aficionados. Pero entregar a estos últimos la dirección de estos procesos es sumamente peligroso, mas si se cuenta que pueden estar presentes dentro del escenario de participación individuos, que siendo profesionales o dirigidos por tales, pretenden socavar las estructuras del poder público.

Desde la última década del siglo XX, nuestro país, vive un escenario como el planteado. Toda una generación de ilustres ciudadanos, poetas, escritores, intelectuales, historiadores y demás, todos ellos con las más nobles intenciones y el más profundo amor al país y al prójimo, pero con una profunda afición por la política, se dedicaron a construir el mito del socialismo venezolano. Sin darse cuenta que lejos de levantar las bases de una moderna sociedad, están siendo manipulados por políticos profesionales, preparados en las más oscuras y maquiavélicas centro de adiestramiento y adoctrinamiento, para destruir en solo dos décadas la más avanzada de las sociedades  latinoamericanas.

A tal grado de destrucción que han logrado volver al país al menos ochenta años, al dejarlo sin suministro de combustible, escases de agua potable, gas domestico e incluso servicio de televisión. ¿Tendremos que volver a las cavernas y churuatas para entender que la política no es para aficionados?